Como decía el propósito del algoritmo no es proporcionar datos correctos, no es una Wikipedia. Eso no tiene apenas interés, ya existe Google para proporcionar datos concretos a solicitudes de ese tipo. Que diga que en el castillo de tu pueblo hay más torres de las que tiene es irrelevante, basta que se haya nutrido de una fuente imprecisa para cometer ese error por ejemplo.
Lo meritorio del algoritmo es el nivel de comprensión de las preguntas que se le hacen y su capacidad de dar respuestas bien hiladas y relacionadas con respuestas que ha dado previamente. No hay que preguntarse
para qué me sirve a mí esto ahora, sino
para qué pueden llegar a servir estas tecnologías a la humanidad. No es ni mucho menos un producto terminado pero logra cosas que no se habían visto hasta ahora.
Algunos se han apresurado a criticar que no es una verdadera inteligencia, y es cierto, lo que hoy llamamos IA no es una inteligencia. Pero eso no le resta valor. Si un sistema puede dar un servicio indistinguible de una verdadera inteligencia a efectos prácticos al usuario le va a dar lo mismo. Google hizo un experimento en el que
un asistente suyo llamaba a una peluquería y hacía una reserva, y quien lo atendió creyó en todo momento estar hablando con un humano. Ya lo decía Clarke: "Cualquier tecnología lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia".
Salu2!