
Un paseo por NY, dónde las calles no tienen nombre; no busquéis fotografías perfectas de ejecución técnica, nítidas en extremo, las mejores luces o los encuadres más afortunados, no se trata de eso. Sólo es fotografía callejera sin artificios, sin compromisos más allá del matrimonio puntual entre cámara y fotógrafo; captando en cada toma un instante, un momento, como reza el libro, de la vida de sus anónimos protagonistas, con sus defectos y con sus virtudes. Cada una cuenta su historia, individualmente o junto a otras, pero muchas, fuera de las fotos de ambiente, son historias difíciles de captar para quien no ha estado allí en el momento; y son sólo, y por ende, parte de mi historia, mi vivencia y, por qué no decirlo, mi pasión.
El trabajo está íntegramente realizado en color

Ya subiré alguna muestra cuando deje el móvil aparcado tras mi convalecencia colateral unplugged...
Disfrutadlas o no, comentadlas o no, todo vale y todo cabe ...
Salud jóvenes.