No hubo víctimas a pesar de que suele pasar bastante gente, pero de milagro, porque con el estruendo, la vecina del último piso fue a salir al balcón para ver qué pasaba y casi se fue para abajo.
Después de eso, se reformó la fachada con un estilo mucho más moderno, pero con los balcones mucho más pequeños.

Paseo de la Estación Salamanca by José María Gómez, en Flickr